Las Ruinas de San Ignacio fueron declaradas «Patrimonio Cultural de la Humanidad» por la UNESCO.
Las ruinas más conocidas de la reducción de San Ignacio Miní, una misión jesuítica fundada a comienzos del siglo XVII para evangelizar a los nativos guaraníes, por el padre jesuita, hoy San Roque González de Santa Cruz, se encuentran en la actual localidad de San Ignacio, a 240 km de la Ciudad de Puerto Iguazú.